Fue un Lunes en la madrugada cuando saque una caja que guardaba en el piso falso del ropero, por primera vez después de dos años de trabajo, sobre mi mesa contaba el dinero que ahorré durante arduas jornadas laborales, mis ojos veían con gran entusiasmo los billetes que formaban dos torres, mis manos acariciaban billete por billete al mismo tiempo que mi mente sumaba cien más cien, más cincuenta más veinte, más diez....Siempre mis honorarios fueron pagados en nuevos soles, salvo una extraña ocasión cuando hicé un trabajo para una transnacional, me dieron más del monto inicialmente acordado y todos los billetes eran dolares, difícil pasar por alto aquella ocasión, quedó grabada en mi mente el color verde, un color que expresa buena fortuna y riqueza, desde ese día empecé a ver la vida con un tono verdoso, esa tonalidad le daba mucho mayor interes al mundo.
Mi mente se perdió por un momento en el recuerdo de los dolares, cuando de vuelta sobre la mesa con las dos torres de billetes, entre mis dedos sujetaba un extraño billete de una denominación incomprensible, no creía que esos números podian estar juntos en un solo billete, pero existían y formaban el ciento catorce 114, era una locura! ¿Qué chispazo de brillantes o brutalidad originaron tremenda hazaña?. Vi el billete a contraluz para verificar su autenticidad, froté una esquina del dolar sobre una hoja blanca y se despintaba, por último olí el billete apretandolo fuertemente contra mi nariz, todas estas pruebas demostraban que el billete era verdadero ¿Pero aquella denominación tan irracional?. Cruzaron por mi mente varias hipótesis desde las más probables hastas las más absurdas y ninguna me convenció. Lenta y gradualmente un sonido invadía la habitación, una canción que me era familiar, guarde absoluto silencio y puse mi oido en la dirección de la música para identificarla por completo, en un momento el sonido era perturbador y sentía que todo a mi alrededor temblaba sobre todo mi cabeza, finalmente reconocí la música, era una canción de suave melodía, suave melodía que escogí como tono del despertador de mi celular, maldita tecnología entre el vibrador y la melodía de mi celular me despertaron y ahora jamás sabré quien miércoles hizo el extraño billete de 114 dolares.
Fin
3 comentarios:
esos suenos que muchas personas suelen decir nos perdice el futuro y nos llena de ilusiones, tambien puede dejar intrigas cuando de improviso se interrumpe sin llegar a saber que habria pasado en tu caso quien lo habia creado...
Pensé que pagarías la primera ronda con ese billete que de algún lado debiste sacar para ponerlo allí.
El sueño no es más extraño que verle la cara al que te discute el origen del billete.
Si hubieses seguido viendo todo verde talvez habrías terminado de cachaco, por ello hay muchos más colores en el día.
La próxima vez sin tanto esfuerzo y de que sea cuando no hay que trabajar. Allí te veo.
Los sueños son inexplicables y muchas veces carentes de sentido es por eso que son mas fantasía que realidad.
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